¿Qué tienen en común una monja y una cineasta pornográfica?
Encontrar la conexión entre dos aristas aparentemente tan lejanas y diferentes sería una tarea difícil normalmente, pero no es así en este caso donde descubriremos a dos mujeres que principalmente y antes que todos sus títulos le anteceden eso, que son MUJERES -y con mayúsculas. Iré mencionando algunas frases que ellas hayan escrito o dicho y juntos podremos descubrir la conexión que existe entre ellas, sin que ni ellas mismas se imaginen tal conexión.
Por un lado, Lucía Caram, una monja dominica contemplativa, argentina, residente en Barcelona España. Es una monja que ya ha causado muchos comentarios a favor y en contra, diálogos, y hasta enfrentamientos, por sus libros, por sus entrevistas y por la manera tan libre de pensar que la caracteriza.
En la otra arista está Erika Lust, productora y guionista de cine erótico, ella es sueca y también reside en Barcelona. Erika se ha vuelto muy famosa y ha generado muchos debates por la manera de acercarnos la pornografía, principalmente desde una mirada femenina y pasional. Ha revolucionado la industria quitando el modelo machista y poniendo arte y creatividad en el porno.
Actualmente, Lust está produciendo cortos de cine para adultos creadas a partir de las confesiones anónimas que las personas dejan en la web del proyecto.
"El sexo es una bendición cuando se vive sin egoísmos y desde el respeto al otro, y no me escandalizaría si hubiera tenido una relación de pareja con José" -decía la Sor Lucía en una de las entrevistas que más controversias causó.
La realidad es, que ella, dice esas verdades que todos en nuestro interior ya lo sabemos, pero gracias a los dogmas religiosos, prejuicios y la tan mencionada y -a mi gusto- sobrestimada moral nos enfrascamos en un mundo de mentiras, en donde idealizamos hasta lo más simple de la vida, y llegamos al punto de satanizar algo tan natural, sano e importante como lo es la explosión de la vida en un acto: el sexo.
Y aparte del tabú del sexo, en su afirmación tan controversial también cabe el planteamiento de cómo la iglesia y la sociedad han creado la imagen asexuada de la mujer y la madre (con la idealización de María), la cuál es obviamente surrealista y completamente dañina. Es una manera de limitar y controlar la libertad de la mujer, como bien decía la monja Lucía en otra entrevista "hemos ido creando dogmas intentando controlar la conciencia de la gente" -refiriéndose a la iglesia. Y a esta ultima oración de la Sor Lucía ya no hay casi nada para agregar, es así, tal cual lo dijo, la iglesia como institución, está muy lejos ya, de ser una casa proclamadora de la libertad ni espiritualidad consciente, que es lo que realmente nos acerca a lo divino.
En el otro extremo de nuestro análisis, Erika Lust decía en una entrevista: "¡Es que el sexo es la razón de nuestra existencia! Estamos aquí porque alguien, para que naciéramos, tuvo relaciones sexuales. Y sin embargo, el sexo está siempre mal visto, se le ataca continuamente."
Y sé que antes de seguir escribiendo y uniendo similitudes de estas dos mujeres, ustedes ya pudieron enterarse de la inconfundible conexión de los discursos de ambas. Y no es que, sólo la posición frente a la sexualidad que tienen ambas sea lo único que las une, va más allá de solo este tema, la conexión de sus discursos tiene que ver sus la manera de ver la vida, con una mirada mucho más actual, aceptando los cambios del tiempo, y disfrutando de la libertad que nada tiene que ver con libertinaje o irresponsabilidad.
Lo que me gustó de ambas, fue justamente el empoderamiento femenino (y humano) que viven, la libertad con la que se expresan, remando contra corriente, y no sólo por una rebeldía infundada para llamar la atención o ganar "adeptos" sino por una necesidad íntima podríamos decir, una necesidad de hacer lo que hacen porque les sale del corazón como una ráfaga de luz, que no pueden esconder ni limitar. Esa es la verdadera fuerza de la libertad, es, para mi, lo que nos hace ser y estar vivos, el hacer lo que nos salga del corazón, lo que nos haga felices, sin miedos ni prejuicios, que si es con amor, no herirá a nadie. Y puede que ofenda a muchos, que "hiera" susceptibilidades por una falsa moral, pero jamás herirá la libertad, la esencia de cada ser humano.
"Tenemos que hablar con los jóvenes sobre el sexo, sobre el porno, y sobre los efectos que tiene." -decía también Erika en una entrevista. Y es que esto es tan importante y fundamental en la educación de los niños y jóvenes, mucho más cuando ahora ellos son nacidos y criados en la era digital, en donde todo les queda a un clic de distancia, es importante asumir la responsabilidad como adultos de educar desde la libertad y seguridad a los adolescentes. Y quitarnos nosotros los tabúes acerca del sexo y el porno, porque los adolescentes lo van a ver y lo van a hacer, sean de donde sean, crean lo que crean. Por eso, deben saber que el porno que ven, casi en su totalidad es ficticio, es sexo exagerado y muy surrealista. Son como las películas de acción, son actos reales pero exagerados que no pasan así en la vida real.
Es también culpa de ese tipo de pornografía que los hombres creen mitos falsos sobre la sexualidad de la mujer, por ejemplo pensando en que la penetración solamente ya le brinda el placer necesario a una mujer para llegar a un orgasmo, lo cual es una mirada muy machista del sexo, y como comenta Erika sobre esto diciendo: "a mí no me gusta cómo se usan los cuerpos femeninos para satisfacer a los hombres, y no para satisfacerse a ellas mismas...La mayoría necesitan una estimulación clitoriana, el porno nos ha machacado con la penetración".
Es por esto que Erika decidió crear contenido erótico con contenido consciente, es decir, que llame a la exploración del sexo consciente y fundado en el respeto mutuo de las partes. Me parece una labor tan importante que en una industria que tiene tantos consumidores (para no decir todos, porque todos consumen pornografía por lo menos alguna vez) sea también responsable en mostrar más realidad, que promueva una vida consciente, que es importante en todos los aspectos de la vida.
Otras frases con la misma visión y discurso que invita a cuestionarse que estas dos mujeres de las que estamos hablando dijeron son:
"Estamos al borde de una sociedad en la que puede comenzar a darse una censura importante" -expresaba Erika, hablando sobre la censura que sufren muchos artistas cuando en sus obras abordan temas que hieren susceptibilidades, como lo es en el caso del cine erótico. Y ¿para qué sirve el arte si no para cuestionar hasta lo incuestionable? El artista suele diferenciarse del resto justamente por esto, el don y maldición de cuestionarse todo y crear arte hasta de la mierda de la vida.
Yo me atrevería a usar esta frase de Erika incluso en otros contextos, para hablar por ejemplo de la auto-censura que muchos practican bajo la doble moral de aparentar una vida idealizada sin errores, la cual es razón de tanta infelicidad en la gente. Porque la censura nunca a causado más que frustraciones, infelicidad y tarde o temprano se estrella con el libertinaje, en actos irresponsables que no son más que una vida sin conciencia.
"La iglesia es un mal vendedor del mejor de los productos...la figura de Jesús de Nazareth viene a denunciar y a quitar las cruces que oprimen a la gente" -frases de la Sor Lucía. Creo que en esa frase dijo más sobre la iglesia de lo que cualquiera podría decir. Primero, poniendo a la iglesia en la posición de vendedor de esta gran figura que es Jesucristo, y concuerdo tan plenamente con esa frase de Lucía ,y digo que -al igual que ella menciona siempre-, Jesús es una figura que representa tanto amor, pero con mucha rebelión, es una figura que viene con un mensaje desestabilizador y denunciante de las injusticias, es sin dudas, una de las personalidades más importantes de la humanidad, no sólo desde el aspecto religioso y espiritual, sino como humano y como hombre. Y la iglesia se ha encargado de crear una figura de Jesucristo mucho más surrealista, idealista y casi completamente alejada del Jesús real, lo cual, sin dudas aleja cada vez a más personas de su mensaje original de paz, amor y libertad, pero una paz que no implica sedentarismo espiritual, sino acción y revolución con y para la paz. ¿Qué mayor libertad que la de quietar las cruces opresoras de la falsa moral?
"Cambiar el sistema por las costuras, porque por arriba no cambiará." -decía Sor Lucía hablando más allá de la religiosidad, abordando temas hasta políticos Lucia da un mensaje de constante cuestionamiento personal, como denota esta frase. La importancia de hacerse cargo cada uno de sus propias responsabilidades, de saber que el cambio está desde uno mismo, a eso se refería cuando decía "por las costuras" sin repetir el mismo discurso de todos, que los de arriba son los malos, que el sistema está corrompido por los grandes y etc. sin dar una solución más allá de las quejas vacías. Lucía propone cambiar lo que haga falta desde el lugar en el que te toque estar, sin esperar nada de el otro, siendo ejemplo, como lo fue Jesús para nosotros.
Porque las mujeres no somos "Monjas o Putas" somos mucho más, somos las dos cosas y ninguna, somos y podemos ser lo que se nos antoge y creo que la razón por la cual me gustaron tanto los discursos de estas dos mujeres es porque tanto nuestra cineasta como la Sor son mujeres que no se quedaron en sus casas a llorar por las injusticias, ya sea en la industria pornografica machista, o en una iglesia castradora de pensamientos; estas dos mujeres han salido a hacer lo que quisieron, a que sus voces sean escuchadas, han salido a hacer por ellas mismas lo que no les dieron, y antes de esperar que las reconozcan ellas se reconocieron primero, esa es la clave de una MUJER empoderada, es quien sabe quién es.
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Puedes ver más sobre ellas en youtube:
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